Una bisagra es un herraje que tiene 2 piezas unidas y la unión es mediante un eje que permite que las piezas se giren.
Se suelen usar para muebles y puertas.
Encontramos las bisagras de libro, que son las más conocidas, sencillas y fáciles de usar y dentro de esto hay diversos modelos.
Este tipo de bisagra se abre en forma de libro y se atornillan, se unen sin esfuerzo.
Las de tipo piano son de tamaño mayor y para sujetarla es necesario un número mayor de tornillos, así la bisagra es más fuerte y resistente al uso. Hay modelos que suelen ser grade y tu eres quien corta según necesidad. Se puede cortar con tijera de chapa.
Las bisagras desmontables, se pueden desmontar sin quitar los tornillos. En su punto de unión tienen un pasador.
Las bisagras de Pernio se usan en las puertas y ventanas. Cuesta ponerlas y las usan los profesionales. Se puede realizar con una fresadora y se pueden poner de diversas maneras.
Las bisagras invisibles, unen tableros.
Las de doble acción se usan cuando una puerta necesita ser abierta mediante doble apertura ya que facilitan la entrada y la salida de las personas que vayan a pasar por ellas.
Las de cazoleta se suelen utilizar en las cocinas ya que son prácticas y fuera del mueble no se ven.
A partir de un cierto ángulo se cierran solas. No son fáciles de instalar ya que son complejas. Si se instalan mal hace que no funcione de forma correcta y la puerta no abra.
Hay tres tipos que son de cazoleta que se debe usar recta, bisagra super acodada cuando la puerta es interior y acodada cuando la puerta está en zona intermedia.
Las bisagras de superficie no tienes que realizar un fresado para poder ponerlas. Son fáciles de instalar y las bisagras para vidrios tienen forma de U y se encarga de sujetar el cristal. Cuando está sujeto hay que sujetarlo bien para evitar que el cristal se salga a través de uno o varios tornillos.
Hay muchos tipos de bisagras en el mercado. En ocasiones tendrás que acudir a tiendas específicas.